miércoles, 5 de noviembre de 2025
Mis hijos, oren siempre por sus seres queridos, por todos aquellos a quienes han conocido y que han dejado este mundo; algunos ya han alcanzado el cielo, pero muchos aún están en el purgatorio; sus oraciones pueden acortar el tiempo de purificación…
Mensaje de la Santísima Virgen María y San Juan el Apóstol al Grupo del Amor a la Santa Trinidad en el Monte de los Milagros, Oliveto Citra, Salerno, Italia, el 2 de noviembre de 2025, primer domingo del mes
SANTÍSIMA VIRGEN MARÍA
Mis manifestaciones aquí son para todos aquellos que vienen aquí.
Hijos míos, yo soy la Mujer Vestida de Sol, la Mujer del Apocalipsis, la mujer que prevaleció sobre el mal por la voluntad de Dios Todopoderoso Padre, Él me ha encomendado a todos ustedes, al mundo entero, para que con mi amor sus corazones se abran a Mi Hijo Jesús, su Salvación; la Santa Trinidad está entre ustedes.
Este es el lugar de morada de la Santa Trinidad, aquí no hay mal, los Arcángeles protegen este lugar que pronto será conocido y reconocido en todo el mundo, apresuren los tiempos con sus oraciones, con su apertura a Dios quien es el Maestro del mundo entero; el mal nada puede hacer sin Su consentimiento. Muchas veces Dios Todopoderoso Padre permite que el mal los rodee para probar su fe, pero muchas veces son ustedes mismos quienes le dan al mal la oportunidad de acercarse a ustedes desobedeciendo los Mandamientos de Dios Todopoderoso Padre, los mandamientos que los mantienen en el camino correcto.
Hijos míos, no tengan miedo; yo siempre los ayudo y nunca me cansaré de hacerlo. Conozco el futuro de la humanidad, que tendrá que enfrentar una purificación porque nadie puede alcanzar el cielo sin ser purificado.
Hoy es un día muy especial; la presencia de los Santos y de los Ángeles está muy fuerte entre ustedes, todos los Apóstoles están aquí, el Apóstol Juan escribió mucho sobre mí, muchas cosas han sido ocultadas al mundo y serán reveladas por el Apóstol Juan en estos tiempos; muchos creerán porque daré muchas señales a lo largo del mundo; muchas religiones se arrepentirán. El Apóstol Juan está aquí y está a punto de hablarles.
Hijos míos, siempre oren por sus seres queridos, por todos aquellos que han conocido y han dejado este mundo, algunos han alcanzado el Cielo, pero muchos aún están en el Purgatorio, sus oraciones pueden acortar el tiempo de purificación, y a través de sus oraciones ellos pueden obtener permiso del Dios Todopoderoso Padre para ayudarte. El Purgatorio es un gran misterio que pertenece a la Santa Trinidad. Poco a poco, los misterios serán revelados a ustedes, aquellos que les ayudarán a salvar sus almas.
El Apóstol Juan siempre invocaba los nombres de sus hermanos que caminaban con él siguiendo al Maestro, y hoy también invocará sus nombres.
SAN JUAN EL APÓSTOL
Hermanos, hermanas, soy Juan el Apóstol de Cristo, me honra hablarles a todos sobre los misterios que el mundo desconoce.
Hermanos, en nuestros tiempos no fue fácil seguir las verdades, el Padre nos ayudó a continuar la misión que nuestro Maestro nos encomendó, subiendo a la Cruz por todos nosotros. María , Nuestra Madre, Nuestra Guía, nunca permitió que el mal entrara entre nosotros. Su amor maternal llenaba nuestros corazones y mantenía nuestra fe fuerte, para que el mundo conociera la verdad. Muchos se burlaron de nosotros, diciendo mentiras para desacreditarnos e impedir nuestra misión, pero Nosotros Apóstoles junto con María invocamos al Espíritu Santo, el Espíritu que el Padre nos había dado.
Yo Juan junto con mis hermanos, invocábamos nuestros nombres para que el Padre nos uniera cada vez más en el Espíritu.
Pedro únete a mi corazón, Tomás únete a mi corazón, Judas únete a mi corazón, Andrés únete a mi corazón, Santiago únete a mi corazón, Pablo únete a mi corazón, Tadeo únete a mi corazón.
Hermanos, haced esto también para que os unáis cada vez más en el Espíritu.
SANTÍSIMA VIRGEN MARÍA
Hijos míos, el Apóstol Juan siempre pedía confirmación cuando escribía la Apocalipsis, y en esos momentos sus hermanos se le aparecían dándole confirmación, haciéndole entender sobre todo que nunca estaba solo en esta gran misión, porque la Apocalipsis habla del futuro de la humanidad, habla de todos aquellos que han dejado este mundo en Santidad, habla de la Resurrección, habla del juicio final, la Apocalipsis es el plan de Dios Padre Todopoderoso.
Hijos míos, todos aquellos que han dejado este mundo hoy tendrán una oportunidad para acercarse al Cielo. Tus seres queridos están aquí por la voluntad de Dios Padre Todopoderoso. Cada uno de vosotros, decid sus nombres.
Hijos míos, vuestras oraciones dan fuerza porque algunos lugares en el Purgatorio son muy dolorosos. Orad nuevamente para que la misericordia de la Santísima Trinidad conceda gracia a muchos de ellos que han dejado este mundo en pecado. Seguid diciendo sus nombres, cantando sus nombres.
Hijos míos, muchos de vosotros habéis sentido un fuerte calor, confirmadlo, hijos míos. Muchos de vosotros habéis sentido fuertes escalofríos, confirmadlo, hijos míos. Muchos corazones están llenos de alegría, confirmadlo, hijos míos.
Gracias, hijos míos. Os amo inmensamente, estoy muy feliz de escuchar vuestras oraciones, perseverad porque aquí mi Hijo Jesús pronto, en vuestro tiempo, realizará grandes curaciones, del alma y del cuerpo, incluso hoy Él desea pasar entre vosotros para derramar el Espíritu Santo, para liberar algunos corazones que aún están muy tristes.
Muchos corazones han sido tocados porque mi Hijo Jesús los ha hecho latir muy fuerte, confirmadlo, hijos míos.
Invocad siempre a los Arcángeles porque pronto se manifestarán con gran poder. El Arcángel Gabriel anunciará pronto la fecha en que, por voluntad de Dios el Padre Todopoderoso, iréis a orar a la Puerta. Allí también os daré muchas señales. Os amo, Mis hijos, ahora debo dejaros, os doy un beso y bendigo a todos, en nombre del Padre , del Hijo y del Espíritu Santo.
¡Shalom! Paz, Mis hijos.