sábado, 20 de septiembre de 2003

Sábado, 20 de septiembre de 2003

Mensaje de Jesucristo dado a la Visionaria Maureen Sweeney-Kyle en North Ridgeville, EE. UU.

"Soy tu Jesús, nacido Encarnado. He venido a ayudarte a darte cuenta de que el Espíritu Santo está ocupado inspirando a las almas a entrar en la Confraternidad, así como en la Orden de Sacerdotes."

"Mientras Él está activo en tantos, te digo que aquellos más maduros en el Espíritu no hablan a otros sobre la acción del Espíritu Santo en sus vidas. Más a menudo que no, las gracias recibidas por el poder del Espíritu Santo deben mantenerse entre el Espíritu Mismo y el alma. El alma debe compartir todo con su director espiritual. Sin embargo, hacer que todas las gracias que recibe sean generalmente conocidas puede transgredir la humildad misma y acercarse al orgullo espiritual. Si los dones del alma se hacen conocidos a otros, todo honor y gloria deben darse a Dios, porque en verdad Él es la fuente."

Maureen pregunta: "¿No le gusta al Espíritu Santo que la gente dé testimonios?"

"Todo depende de lo que haya en el corazón en ese momento. Si viene de un corazón lleno de orgullo espiritual (mira las gracias que recibí) - 'no' - si se da testimonio para mostrar cómo el Señor está trabajando para dar alabanza a Dios - entonces 'sí'."