jueves, 28 de agosto de 2003

Mensaje de Nuestra Señora Reina de la Paz a Edson Glauber en Brescia, BS, Italia

Nuestra Señora

¡La paz esté contigo!

Mis queridos hijos, soy vuestra Madre Celestial que os invita una vez más a la oración y a la conversión. Os amo y vengo esta noche para acogeros a todos en mi Corazón, pues deseo guiaros por el camino al Cielo.

Hijitos, Jesús os ama mucho y desea de vosotros fidelidad y perseverancia. Orad para que os deis cuenta de que vuestras vidas son tan importantes para el Creador, que os creó para ser testigos de su presencia en el mundo. Aquellos que escuchan la voz del Señor y que viven su Palabra, estén seguros de su bendición y protección. Dios quiere derramar cada vez más de sus gracias sobre el mundo. Dios quiere derramar cada vez más de sus gracias sobre el mundo. Veréis cosas que vuestros ojos nunca han visto, y seréis testigos de lo poderoso y fuerte que es el Señor; orad, porque en este momento el Señor os bendice. A todos mi bendición maternal: en nombre del Padre, el Hijo y el Espíritu Santo. ¡Amén!

Coraje, hijo mío, tu Madre está siempre a tu lado para ayudarte. Gracias por tu disponibilidad. Con vuestras oraciones me estáis ayudando a salvar a tantos jóvenes de las manos del diablo. Estoy feliz de que muchos jóvenes estén abriendo sus corazones a Dios. Orad, orad, orad y confiad.

Mañana será un día muy especial.