jueves, 4 de enero de 2007

Mensaje de Nuestra Señora Reina de la Paz a Edson Glauber en Paderno, Italia

¡La paz esté con vosotros!

Queridos hijos, soy vuestra Madre celestial y deseo que todos vosotros podáis escuchar mis llamadas, siendo testigos de ellas para vuestros hermanos y hermanas para que la gracia del Señor alcance muchos corazones cerrados a su amor divino.

Os amo, queridos hijos, y deseo encender vuestros corazones con un gran amor por Dios.

Sed fieles y obedientes al Señor, respetando sus mandamientos, viviendo una vida santa, y grandes gracias del Cielo descenderán sobre vosotros y vuestras familias.

Os agradezco vuestra presencia aquí esta noche, y os digo que más que nunca debéis regresar al Señor por el camino de la conversión, porque grandes castigos están a punto de caer sobre el mundo.

Intercedo, llamo ante el trono del Señor, pidiendo su misericordia, pero vosotros, mis hijos, escuchad y vivid mis súplicas profundamente. Os amo y no quiero que os perdáis para siempre, porque el infierno es terrible y está lleno de odio, y fuisteis creados por Dios para amar y ser testigos del amor. Orad, orad, orad. Os bendigo a todos: en el nombre del Padre, del Hijo y del Espíritu Santo. ¡Amén!