jueves, 12 de agosto de 1993

Mensaje de Nuestra Señora

Hijos Míos, vengo a rogarles que oren! Cada vez más, oren por los pecadores!

Hijos, ya estoy cansada de decirles que se conviertan. Queridos hijos de mi corazón, hoy los reprendo maternalmente. Quieren vivir sin estar comprometidos con las prácticas cristianas. Dicen: - ¿Por qué ayunar? ¿Por qué rezar el Rosario? ¿Por qué vivir los Mensajes?

Hijos, si no entienden, les explico ahora: - Mis Mensajes no son Dogmas de Fe, ni otro Evangelio. ¡Son repeticiones del Evangelio! ¡Conducen al Evangelio! No puedo obligarlos a creer en los Mensajes, ni a que yo estoy aquí en Jacareí, así que les pido que abran su Corazón para que entiendan lo que quiero comunicarles. con AMOR.

Algunos están dudando de Mis Manifestaciones. ¡Oh hijos, vengo a la tierra por orden de mi Señor para ayudarlos, para consolarlos, para animarlos en este viaje tan duro hacia DIOS.

Dicen, "¿Yo, dejar de ver la telenovela y rezar con la familia? ¿Yo, dejar de ir al baile para estar en adoración? ¡De ninguna manera!" Hijos, ¡oren en familia! ¡Oren con el Corazón! Mucha gente piensa en rezar después de ver telenovelas; ¡está mal!!! Es imposible que alguien ore bien en estos casos. Satanás les trae de vuelta a la mente y al corazón todo lo que han visto antes. ¡Renuncien a la suciedad de la TV! ¡Satanás quiere controlarlos a través de la televisión!!! Les presenta estas sucias seducciones a través de otros programas.

¡Despierten! ¡Abran los ojos, hijos Míos! ¡Dejen la falta de Fe! Yo no puedo sanar. Solo DIOS puede. Yo pediré, intercederé, pero… ustedes apriétense el cinturón, ¡conviértanse! ¡Oren! Si no oran, no se les concederá ninguna Gracia.

Están dejando a mi Hijo Jesús abandonado en el Tabernáculo. ¡Amenos! Busquen a Jesús en el Santísimo Sacramento. ¡No comulguen en pecado! ¡Sean fieles!

Los bendigo en nombre del Padre, del Hijo y del Espíritu Santo.