viernes, 22 de enero de 2010

Viernes, 22 de enero de 2010

(Aniversario de Roe vs. Wade)

Jesús dijo: “Mi pueblo, en la era del Cristianismo temprano los buscaban y mataban si practicaban su fe cristiana. Incluso hoy en algunos países comunistas se arriesgan a la cárcel o al martirio por ser cristianos. Muchos de estos primeros mártires se convirtieron en santos y fueron canonizados por Mi Iglesia. También hoy, tienen nuevos mártires en todos los bebés que están siendo asesinados por el aborto. Su sociedad, por sus leyes, tiene poco respeto por la vida en el vientre e incluso la vida al final en la vejez. Cualquier tipo de asesinato no es un comportamiento aceptable a Mis ojos. La defensa propia y las situaciones de guerra justa pueden estar justificadas en la autopreservación, pero cualquier otro asesinato va en contra de Mi Quinto Mandamiento. Cuando se les permite matar por aborto o eutanasia, su sociedad no aprecia lo preciosa que es la vida para ser honrada. Sus marchas por la vida en este día de la decisión judicial recuerdan cada año lo brutal e inhumano que es su pueblo al matar a sus propios hijos. Han leído estudios sobre el aumento del abuso de sus hijos, pero matarlos es el abuso definitivo. Si las personas pueden ser juzgadas por asesinato al matar a sus hijos nacidos, ¿por qué no deberían ser juzgadas por asesinato al matar a sus hijos no nacidos? Sus leyes en esta área no son consistentes, y van en contra de Mis leyes, que es lo más importante. Trabajen para detener el aborto en sus oraciones y acciones. Incluso si las personas los persiguen por ser francos sobre el asesinato de Mis bebés, estén dispuestos a defender un bien mayor contra su sociedad malvada.”

Jesús dijo: “Mi pueblo, como adultos ya están vivos y ven a algunas madres teniendo abortos que están rezando para que tengan a sus bebés. Con demasiada frecuencia, los abortos se realizan para ocultar aventuras fuera del matrimonio o cuando las personas casadas no quieren tener más hijos. Si fueran el alma en un bebé en formación que corre el riesgo de ser asesinado, estarían rezando por padres amorosos que ni siquiera considerarían tener un aborto. Si fueran un bebé en formación que está siendo abortado, parecería un terror inesperado ser asesinado por su propia madre. Las madres deben pensar en la vida como algo precioso, y los bebés son demasiado valiosos para ser sacrificados como un animal que usarían para comer. Estos pequeños son indefensos y vulnerables al necesitar cuidado para su supervivencia. Solo deben tener el acto matrimonial si están casados y están dispuestos a tener cualquier hijo que resulte de sus relaciones. El adulterio y el fornicación son pecados mortales que requieren Confesión, pero el aborto agrava estos pecados con un pecado peor de asesinato. Todos los bebés no nacidos son seres humanos y no solo carne. Cada bebé no nacido tiene un alma y un cuerpo del que los padres son responsables. Cuando piensan en el aborto desde el punto de vista del bebé, el aborto se convierte en un crimen mucho más grave. Esta es la razón por la que su sociedad es muy malvada cuando piensa que estas vidas son prescindibles. Oren para que todas las madres eviten el aborto a toda costa, incluso si tener un bebé puede ser vergonzoso para los padres.”