domingo, 29 de julio de 2012

Domingo, 29 de julio de 2012

Domingo, 29 de julio de 2012:

Jesús dijo: “Mi gente, a lo largo de mis tres años de ministerio, realicé muchos milagros para sanar a la gente tanto espiritual como físicamente. Este milagro de la multiplicación del pan y el pescado es una señal de cómo yo traeré mi propio Cuerpo y Sangre a todos aquellos que me reciban dignamente en la Sagrada Comunión. Estoy verdaderamente presente en cada Hostia consagrada, y ustedes reciben mi gracia de este sacramento eucarístico cada vez que me reciben. Algunos de mis fieles incluso vienen a visitarme y adorarme en la Adoración de mi Bendísimo Sacramento en el monstrario. Si bien estoy presente en mis tabernáculos, es aún más personal ver a tu Dios en mi Hostia expuesta en la Adoración en el monstrario. También reciben gracia cuando vienen a adorarme y alabarme en mi tabernáculo o expuesto en el monstrario. La Adoración Perpetua en varias iglesias es una bendición para mis fieles, y debe ser promovida en todas partes. Mis adoradores son especiales para mí porque son verdaderos creyentes en mi Presencia Real. Enseñen a sus hijos y amigos acerca de las gracias y bendiciones que pueden recibir al visitarme en mi tabernáculo. Cuando vienen a visitarme, están en paz en el silencio de su oración contemplativa. Escucho todas sus peticiones de oración, y todas las cosas que puedan estar preocupando su alma. Lo que me pidan en oración, responderé a mi manera y en mi tiempo. Regocíjense en el compartir de mi amor porque siempre estoy con ustedes.”