miércoles, 3 de abril de 2024

¡Alegraos, porque el Hijo de Dios ha Resucitado!

Mensaje de Pascua de Jesús El Redentor a Ned Dougherty en Hampton Bays, Nueva York, EE.UU. el 31 de marzo de 2024

Vengo a ti hoy en esta celebración de Mi resurrección de entre los muertos como Jesús el Redentor, pues como tu Redentor hago que todas las cosas sean nuevas de nuevo, no sólo para ti y tu alma, sino para todas las almas creadas por el Padre del Cielo desde siempre.

Porque Yo soy el Camino, la Verdad y la Vida. ¡Nadie llega al Padre si no es a través de Mí!

Por eso, en este Domingo de Resurrección, Mi mensaje para ti es muy claro, sobre todo en estos Últimos Tiempos en los que el maligno te desafía de tantas maneras a cuestionar y dudar de tu fe en Mí. Puesto que estoy aquí para ti personalmente, ¿cómo puedes vivir ahora en la duda?

Estoy aquí contigo a través de este día de resurrección en Espíritu, tan poderosamente como si estuviera aquí contigo en cuerpo, como lo estuve cuando fui crucificado en la Cruz hace más de 2.000 años. Este día ha sido grabado en piedra y se revive todos y cada uno de los días para que todos podáis experimentar el dolor, la pérdida y la pena de que el Hijo del Padre fuera torturado y crucificado en la Cruz por los propios hijos del Padre.

¿Podéis comprender el dolor y la angustia del Padre del Cielo por el hecho de que Su Hijo tuviera que nacer en vuestro mundo para salvar a la humanidad, sólo para ser crucificado por los propios hijos de Dios?

Ciertamente, reconocéis que las obras del maligno hicieron necesario Mi viaje entre vosotros para hacer todas las cosas nuevas de nuevo y que tuve que hacer ese sacrificio por todos vosotros para dar ejemplo a toda la humanidad del Amor del Padre por todos Sus hijos.

Así que aquí, en estos Tiempos Finales, unos 2000 años después, la Crucifixión, Muerte y Resurrección del Hijo se repite, una y otra vez, porque los hijos de Dios pueden ser tercos y testarudos a la hora de aceptar la Verdad de la Salvación.

¿No es esto obvio para todos vosotros cuando veis cómo el maligno se ha apoderado de vuestro mundo y ha seducido a la humanidad para que viva vidas de avaricia y codicia, de comportamiento lujurioso y de intención asesina en muchos casos?

Como Hijo del Padre, reconozco lo difícil que os resulta llevar una vida conforme al plan del Padre. Por esta razón, como Hijo del Padre, he intervenido en la vida de los hijos de Dios, pues Mi papel como Vuestro Salvador y Redentor es conduciros a todos de vuelta al hogar del Padre celestial.

¡Así sea! ¡Gracias sean dadas a Dios!

En Mi vida terrenal, creé la Iglesia del Hijo sobre la roca de Pedro, y la Iglesia ha sobrevivido a lo largo de estos 2000 años, pero la Iglesia se encuentra ahora sumida en la confusión porque los pastores de Mi Iglesia han perdido el rumbo a la hora de guiar al rebaño, todos vosotros Mis hermanos y hermanas.

Debo pediros -a los hijos e hijas del Padre- que actuéis como Poderosos Guerreros de la Oración para sostener a Mi Iglesia a través de estos Tiempos Finales. Rezad por el Papa, los Cardenales, los Obispos y todos los sacerdotes que se han extraviado y han reducido a la Iglesia de sus valores tradicionales a una sombra de lo que fue.

Dependerá de vosotros, Mis valientes y poderosos Guerreros de la Oración, sostener los jirones de Mi Iglesia a través de estos Tiempos Finales en preparación de Mi regreso a la humanidad para hacer que todas las cosas sean nuevas de nuevo.

No desesperéis, pues ese momento llegará pronto.

En verdad, en verdad os digo: ¡Yo soy el Camino, la Verdad y la Vida! ¡Nadie viene al Padre sino por Mí!

Origen: ➥ endtimesdaily.com