miércoles, 12 de diciembre de 2001

Servicio del Rosario de Medianoche en el Santuario de los Corazones Unidos; Fiesta de Nuestra Señora de Guadalupe

Mensaje de Nuestra Señora de Guadalupe dado a la Visionaria Maureen Sweeney-Kyle en North Ridgeville, EE. UU.

La Santísima Madre está aquí como Nuestra Señora de Guadalupe, y tiene el Rosario de los No Nacidos enmarcado a su alrededor. Ella dice: "Alabado sea Jesús."

"Mis queridos hijos, Mi Hijo permite que yo les hable una vez más. He venido a ayudarles a comprender su lugar en la historia y en los acontecimientos actuales. He venido a ayudarles a comprender su lugar ante Dios. Están ocupados venciendo al enemigo en una tierra lejana; sin embargo, no lo reconocen en su propia nación en la forma del aborto legalizado. No lo reconocen en sus propios corazones cuando pecan. Pecan cuando no hacen nada para detener la atrocidad del aborto. Si no hacen oír su voz, especialmente ante el Trono de Mi Hijo rezando contra el aborto, este pecado continuará y el enemigo continuará ganando corazones."

"No esperen que Dios se conforme a sus leyes. Ustedes deben conformarse a Sus leyes. Mi Hijo ha sido muy paciente al observar la vida que Él forma en el vientre destruida. Pero, Mis hijos, Su paciencia se está agotando y las advertencias del Cielo se están agotando."

"Cuando el aborto se legalizó, el futuro de su país cambió para siempre. Líderes mundiales han sido aniquilados, así como grandes científicos. Jesús Me envía a ustedes una vez más pidiendo un fin al enemigo interno. Pongan fin al aborto. Entonces su país prosperará una vez más."

"Queridos pequeños hijos, esta noche he venido a ofrecerles la compasión de un Corazón de Madre. Su país ha comenzado un renacimiento espiritual bajo este presidente. Mi esperanza es que no se quede corto al llamar a detener el aborto legalizado. Mi esperanza está en sus oraciones. No teman a los grupos subversivos tanto como teman al pecado."

"Deben comprender que no necesitan un Nuevo Orden Mundial--el mundo necesita un nuevo corazón. No necesitan un Gobierno Mundial--el mundo necesita un corazón universal de Amor Santo. La vida tiene un principio y un fin según la Divina Voluntad de Dios. Solo Dios debe decidir cuándo y cómo comienza y termina cada vida. Cada vez que el hombre interfiere en este proceso, el corazón del mundo se aleja más del plan de Dios. Es entonces cuando la discordia entra en los corazones y ustedes experimentan la guerra y la violencia."

"Mis hijos, les estoy suplicando a Mi Hijo que pronto venga un nuevo Pentecostés sobre toda la tierra--un Pentecostés en el que todos los corazones sean iluminados en cuanto a su posición ante Dios. En esta hora de iluminación, nada permanecerá oculto bajo la cubierta de la oscuridad--todo será traído a la luz. Oren conmigo por esta gracia."

"Queridos hijos, he venido a ayudarles a poner fin al reinado de terror de Satanás en los corazones. La hora de Mi Gracia está sobre ustedes. Abran sus corazones, Mis hijos, y respondan."

"Queridos hijos, no dejen que sus oraciones surjan del miedo, sino del amor. Cuanto más amor tengan en sus corazones, más cerca estarán de Mi Hijo y de Mí. Mi Victoria está en cada corazón que vive en el Amor Santo. Permitan que Mi Victoria reine en sus corazones esta noche."

"No dejen que Satanás los asuste o les cause dudas. ¿No estoy aquí? ¿No soy su Madre? En verdad, los sostengo bajo Mi Manto y en el cruce de Mis Brazos. Los he llamado aquí esta noche para escuchar sus peticiones. Este lugar lo he separado para todas las naciones y cada generación. Mi bendición y favor permanecen aquí para todas las generaciones. Aquí Mi Corazón se apiada de todos."

"Mis queridos hijos, gracias por orar conmigo esta noche contra el pecado del aborto. He venido a asegurarles que el Cielo está escuchando sus oraciones. Como han trabajado tan diligentemente para iluminar este campo, el Cielo ahora está iluminando corazones. Ven señales de gracia a su alrededor. Ven señales de Luces Celestiales. Mis queridos hijos, entonces no se desanimen, sino sepan que estoy con ustedes, amándolos. Confíen en Mí como Yo confío en ustedes."

"Esta noche, Mis queridos hijos, les estoy extendiendo Mi Bendición de Amor Santo."