martes, 1 de enero de 2008

Mensaje de Nuestra Señora Reina de la Paz a Edson Glauber en Medjugorje, Bosnia Herzergovina

¡La paz esté con ustedes!

Queridos hijos, Yo soy la Madre de Dios, Yo soy la Reina del Rosario y de la Paz, y Yo soy su Madre.

Una vez más vengo del Cielo para llamarlos a la conversión y a la oración, para que puedan regresar al Señor con corazones purificados de todo pecado.

Sean de Dios renunciando al mundo y al pecado. Sean de Dios renunciando a toda mentalidad contra su divino amor que el mundo les enseña. Sean de Dios rezando el rosario con fe y amor por ustedes mismos, sus familias y el mundo, y así la paz del Señor descenderá sobre sus vidas, sobre sus familias y sobre todo el mundo. Los bendigo y les digo que estoy feliz de que estén aquí para

Los bendigo y les digo que estoy feliz de que estén aquí para orar y los bendigo uno por uno, dándoles mi protección maternal. Los bendigo a todos: en el nombre del Padre, el Hijo y el Espíritu Santo. ¡Amén!

Siempre oren esta oración que su Madre Celestial les enseña: Oh Sagrada Familia de Nazaret, Jesús, María y José, béndiganme, ayúdenme y protéjanme contra todo mal y peligro, alejando con su Santo Manto todas las trampas y tentaciones del diablo, dándome su gracia, su bendición y su luz que irradian de sus Sagrados Corazones para que pueda amar, adorar y glorificar al Padre, sirviéndolo y haciendo su Santísima Voluntad. ¡Amén !

Por la noche, durante mi sueño, soñé con el Santuario de Nuestra Señora ya construido en Itapiranga. Era muy hermoso y vi al Obispo Carillo Gritti muy feliz que lo bendecía por dentro con incienso, cada lugar. También vi llegar al Padre Danilo, quien exclamó asombrado: ¡Qué grande y hermoso es! Inmediatamente después me desperté. Estaba muy feliz con este sueño y mi corazón latía fuertemente. Agradecí a Nuestra Señora por este sueño, que significó mucho para mí allí en ese lugar, donde Ella ha estado apareciendo durante muchos años. Para mí fue una respuesta y un mensaje especial que Ella me estaba dando, diciéndome que todo en el Amazonas será como Dios quiere y que allí en Itapiranga, este gran Santuario Suyo será construido y conducirá muchas almas a Él. Y allí en Itapiranga Ella, la Reina del Rosario y de la Paz, convertirá muchos corazones y concederá muchas gracias.