miércoles, 28 de mayo de 2008

Mensaje de Nuestra Señora Reina de la Paz a Edson Glauber

La paz de Jesús para ti, queridos hijos, ¡paz!

Queridos hijos, hoy he venido del Cielo para acoger a todas las familias en mi Corazón de Madre. Oren por las familias. Oren por sus familias y por todas las familias de todo el mundo: las familias que no tienen a Dios, las familias que no aman, las familias que están muertas en pecado. Ofrezcan sus oraciones y sacrificios por las familias, mis hijos. Estoy junto a cada familia para asistirlas con el amor y las gracias de mi Madre. Deseo guiarlas a Dios, hasta el cielo. Deseo que cada uno de mis hijos e hijas vivan una vida de santidad unidos a Dios. Una persona que no ora y que vive en pecado no puede pertenecer a Dios. Aquellos que cometen adulterio no pueden merecer el cielo. La Ley de Dios, Sus Mandamientos, deben ser observados por todos. Nadie está excluido de vivirlos, pero todos deben acogerlos en sus corazones y transformarlos en vida. Dios desea salvar a todos los hombres del pecado y de las manos del diablo, por eso envió a mi Hijo Jesús al mundo, para rescatarlos con su preciosa sangre y con su pasión y dolorosa muerte en el Calvario. Oren, mis hijos. Sean de Dios para que Él pueda ser su salvación. Aban sus corazones a Él para que pueda acogerlos en su Corazón. Renuncien al pecado para que Dios pueda concederles la vida eterna. Los amo y los bendigo: en el nombre del Padre, el Hijo y el Espíritu Santo. ¡Amén!

Antes de retirarse la Virgen habló:

Mi Hijo Jesús vendrá a bendecir a toda la humanidad en la fiesta de su Sagrado Corazón. Vengan y reciban su bendición, mis hijos.