Mensajes a Edson Glauber en Itapiranga AM, Brasil
domingo, 9 de febrero de 2020
Mensaje de Nuestra Señora Reina de la Paz a Edson Glauber

Hoy, Jesús ha venido con Nuestra Señora a bendecirnos. Ellos, majestuosos y llenos de amor, desean ardientemente nuestra conversión y salvación eterna y nos han concedido durante la aparición grandes gracias, para que actuemos, en nombre de Dios, por el bien de la Santa Iglesia y la salvación de las almas. Dios actuará con sus dones concedidos, para que seamos testigos de Cristo resucitado, en un mundo lleno de cadáveres, muertos en el pecado y el Espíritu Santo concederá su fuego divino, para que muchos se reenergicen y vivan para la vida de la gracia, siendo hijos de la luz, que llenos de su gloria puedan alabarle y glorificarle, porque el tiempo de la gracia está por los suelos y pronto tristes acontecimientos herirán a tantos que no quisieron convertirse y cambiar de vida. Fue Jesús quien nos dio el mensaje esta noche:
¡Mi paz a todos vosotros!
Hijo mío, he venido del cielo, con mi Madre Inmaculada, para suplicar a vuestros corazones un poco de amor.
Os falta amor, os falta un corazón que ame a Dios sobre todas las cosas; os faltan almas que sepan reparar y sacrificarse por los pecadores.
Aprended a salvar almas, son preciosas para Mí. Por todas ellas derramé mi sangre y sufrí los terribles martirios de la pasión y de la cruz.
Reza, hijo mío, reza para que los corazones se abran a mi amor, para que tus hermanos se decidan a vivir por el reino de los cielos, dejando atrás todas las cosas malas.
No tengas miedo de nada. Mi amor es más fuerte que todo y te protegerá a ti y a todos los que crean en mí.
Pídeme las gracias para el mundo pecador, y Yo, en mi infinita sabiduría, las dispensaré a las almas que tanto las necesitan y que están de acuerdo con mi Divina Voluntad.
Los tiempos son oscuros y difíciles porque la fe se ha enfriado y muchos corazones se han contaminado con las mentiras de Satanás.
Muchos viven en el error y en el pecado, porque no hay nadie que pueda llevarles mi luz y mi gracia, porque muchos viven sólo para sí mismos, en su propio egoísmo e interés.
Busco a los verdaderos apóstoles de estos tiempos, que quieran escuchar mis palabras, vivirlas, llevándolas a los que necesitan luz y conversión.
No pierdas el tiempo, hija mía. Pronto cambiarán muchas cosas en el mundo, porque los pecados de la humanidad están atrayendo mi justicia, que herirá terriblemente a los pecadores.
Muchas regiones de la tierra desaparecerán para siempre, porque no quieren arrepentirse de sus crímenes ni reparar los ultrajes cometidos contra mí.
Estoy concediendo a la Amazonia un tiempo de conversión. No despreciéis esta gracia permaneciendo sordos, pues de lo contrario lamentaréis no haberme escuchado.
Os digo a todos: volved, volved, porque ya no puedo soportar tantas ofensas y pecados. Arrepentíos sinceramente y tendré misericordia de cada uno de vosotros y de vuestras familias. Os bendigo: en el nombre del Padre, del Hijo y del Espíritu Santo. Amén.
Orígenes:
El texto de este sitio web se ha traducido automáticamente. Por favor, disculpa cualquier error y consulta la traducción al inglés.