Mensajes para Marcos Tadeu Teixeira en Jacareí SP, Brasil
martes, 20 de agosto de 2024
Aparición y Mensaje del Sagrado Corazón de Jesús, de Nuestra Señora y de San José el 11 de agosto de 2024 - Fiesta de Dios Padre y Nacimiento de María Santísima
¡Queremos Amor! ¡El Padre Quiere Amor!
Jacareí, 11 de Agosto de 2024
Fiesta De Dios Padre Eterno Y Cumpleaños De María Santísima
Mensaje Del Sagrado Corazón De Jesús - De Nuestra Señora Reina Y Mensajera De Paz Y San José
Comunicado Al Vidente Marcos Tadeu Teixeira
En Las Apariciones En Jacareí Sp Brasil
(Sagrado Corazón): «Mis amados hijos, Yo, el Sagrado Corazón, vengo con Mi Madre y Mi Padre José hoy en la fiesta de Mi Padre Eterno para deciros a todos vosotros:
Quien Me ve ve al Padre, quien Me oye oye al Padre, quien Me ama ama al Padre, quien Me obedece obedece al Padre. Quien no Me escucha no escucha al Padre, quien Me desprecia desprecia al Padre y quien Me desobedece desobedece al Padre.
¡Yo soy el Amor, soy la imagen viva del Padre que es Amor! Al principio de Mis apariciones aquí, mostré a Mi hijito Marcos cómo no sólo Yo, sino también Mi Padre, no queríamos ser temidos con pavor, sino que queríamos ser amados por Él y por todos nuestros hijos.
¡Queremos amor! ¡El Padre quiere amor!
El Padre quiere amor, dale amor al Padre con una vida de oración, sacrificio y penitencia.
El Padre quiere amor, dale al Padre tu amor con obras verdaderas que Le glorifiquen, Le exalten y Le enaltezcan.
El Padre quiere amor, dad al Padre amor verdadero alabándole todos los días de vuestra vida con oraciones, cantos, alabanzas, pero sobre todo, con obras de amor.
El Padre quiere amor, pero no el amor de un siervo que obedece al Padre por miedo al castigo, al Infierno o a cualquier otro castigo. Quiere el amor de un hijo que ama al Padre porque el Padre merece ser amado, que ama al Padre porque el Padre es digno de todo amor, que ama al Padre porque el Padre es Su origen y el Padre es todo el objetivo, el propósito y la razón de Su existencia.
Es este amor de hijo el que el Padre quiere de todos Sus hijos. Buscamos este amor por todo el mundo, pero es difícil de encontrar. Nosotros ni siquiera lo encontramos en 10 almas, pero en 1991, vinimos aquí y encontramos este amor en nuestro pequeño hijo Marcos. Y poco a poco, a medida que fue comprendiendo este amor, se fue abriendo a una capacidad ilimitada de amar al Padre, de amarme a Mí y de amar a Mi Santísima Madre.
Por eso, verdaderamente, en él el Padre encontró el verdadero amor, que sirve muy bien de ejemplo a todos de cómo Él quiere ser amado.
Sí, imitad el amor de Mi hijo Marcos, que es un amor de obras, y daréis al Padre, Me daréis a Mí, daréis también a Mi Madre un amor verdadero y perfecto.
Sí, un amor de obras, un amor que no se ha cansado día tras día, año tras año de luchar y trabajar por el triunfo de Mi Padre en todos los corazones del mundo.
Quien lucha por el triunfo de Mi Madre, lucha por el triunfo Mío y de Mi Padre. Quien obedece la voz de Mi Madre obedece Mi voz, porque Yo estoy en Mi Madre, ella está unida a Mí y quien Me escucha escucha al Padre.
Sí, venir aquí es venir al Corazón de Mi Madre, y venir a Mi Madre es venir al Amor, y venir al Amor es venir a Dios. Por eso, quien escucha a Mi Madre, Me escucha a Mí y escucha a Mi Padre.
Este amor de obras que tanto deseamos sólo puede encontrarse en las almas amorosas como Mi hijito Marcos. Así que tratad de ser esas almas amorosas que tanto deseamos, para que nuestro plan de amor pueda realizarse finalmente en cada uno de vosotros.
¡Os amo, hijos Míos, con el amor del Padre! Y un buen padre hace todo por Su hijo, satisface cada petición, deseo y necesidad de Su hijo. Un buen padre se sacrifica, se da por entero para que Su hijo sea feliz.
Con este amor te amamos el Padre y Yo, te ama el Espíritu Santo. Por eso hacemos todo lo posible por tu felicidad, pero en la mayoría de las almas sólo encontramos ingratitud y desprecio por nuestro amor. Nos cambiamos continuamente por el mundo y las cosas mundanas y este pecado hiere nuestros corazones.
Volved a nuestros Corazones y dadnos este amor de obras y verdaderamente nuestros Corazones se complacerán en vosotros y os colmarán a todos con las mayores gracias de nuestro amor.
Venid a nosotros, tal como sois, tal como sois, y quemaremos vuestras imperfecciones y las reduciremos a cenizas, en las Llamas de Amor de Mi Sagrado Corazón, del Corazón de Mi Madre y en las Llamas de Amor del Padre.
Sí, el Padre os ama, os ama ardientemente a cada uno de vosotros; si decís el sí que Él quiere, Él y Yo vendremos a vosotros y haremos en vosotros nuestro hogar permanente. Sólo queremos sí, ¡sólo queremos amor!
Mira, no he dicho: permaneced siempre sin defectos ni imperfecciones. Pero sí dije: Permaneced en Mi amor, permaneced en Mí, eso es todo lo que quiero. Permanece en Mí y en el Padre y Yo obraré maravillas en ti.
Seguid rezando Mi Hora todos los viernes.
Os bendigo a todos y especialmente a ti, Mi hijito Marcos, que glorificaste a Mi Padre con tantas fiestas en Agosto, con tantos cenáculos y especialmente con las Horas de Oración dedicadas a Mi Padre y con todo lo que has hecho durante toda tu vida para honrarle y glorificarle.
Sí, realmente has cumplido tu vida no sólo en relación con el Padre Eterno, sino también en relación con el padre espiritual que te di en la tierra. Honra a tu padre con palabras, con obras.
Sí, por eso ahora te bendigo generosamente. Gracias a vosotros, gracias a todo lo que habéis hecho, a todo lo que habéis grabado: todas las Horas de Oración, los Rosarios, las películas, los cenáculos, Mis hijos comprenden hoy mejor quién es el Padre y qué clase de amor quiere recibir el Padre de cada uno, de cada hijo.
Por eso os bendigo ahora generosamente, con miles de bendiciones.
Y también te bendigo, hijo Mío Carlos Tadeu, eres precioso para Mi Sagrado Corazón y así como un Padre defiende a un hijo, un Rey defiende Su reino. Y también, así como una golondrina defiende a su polluelo, Yo siempre te defenderé de todos los males y peligros y siempre te guardaré.
Ahora os bendigo: desde Dozulé, desde Paray-Le-Monial y desde Jacareí».
(María Santísima): «¡Soy la Reina y Mensajera de la Paz! He venido del cielo para decir a todos que Dios es Padre, ¡Dios es amor!
Dios es Padre, y como tal ama a Sus hijos con todo Su amor y hace todo por su felicidad eterna.
Dios es Padre, y como tal colma cada día a Sus hijos de bienes, gracias y dones de Su amor.
Dios es Padre, y como tal, no quiere condenar a ningún hijo ni abandonarlo, sino que quiere curarlo de todas sus enfermedades. Quiere embellecerlos, enriquecerlos con Sus propios bienes y hacerlos partícipes de Su propia gloria.
Dios es Padre, y por eso ofrece mil veces Su amor, Su gracia, Sus bienes y Sus tesoros a Su hijo para enriquecerlo y sacarlo de Su miseria.
Dios es un Padre y, como tal, no se resiste a las súplicas de Su hijo y hace todo lo que puede para darle alegría, contento y satisfacción.
Dios es un Padre y muchas veces, muchas veces, deja de escuchar la petición de Su hijo que quiere algo que le hará daño después, para darle algo mucho más grande y mucho mejor.
Dios es un Padre, y como tal, siempre espera el regreso del hijo que se ha alejado de Él: para perdonarle, purificarle, embellecerle, enriquecerle y acogerle de nuevo en Su gloria, Su felicidad, Su paz.
Dios es un Padre bueno y, como tal, duda, vacila mil veces antes de castigar a Su hijo y sólo lo hace para que detenga su locura y para que vuelva a Sus brazos amorosos.
Dios es Padre, Dios es Paz, y quien encuentra a Dios encontrará la paz del corazón.
Venid hijos, venid a Mí y Yo os llevaré a Jesús y juntos os llevaremos al Padre, y entonces conoceréis al Padre de Amor que os he estado mostrando aquí durante 33 años.
Quien viene aquí viene a Mí.
Quien viene a Mí viene al Amor.
Y quien viene al Amor viene a Dios, porque Dios es Amor.
Yo estoy lleno de Amor, porque estoy lleno de Dios, porque siempre he amado a Dios. Ama a Dios y tú también serás bella como Yo.
Reza Mi Rosario cada día, porque sólo con el Rosario puedo conducirte al Señor.
Ataca a Mi enemigo con el Rosario meditado núm. 54, rézalo dos veces y dáselo a dos de Mis hijos que no tengan uno. Ataca también a Mi enemigo con la Hora de la Paz núm. 34, rézala dos veces y dásela a dos de Mis hijos que no la tengan.
¡Paz! ¡Paz! ¡Paz! Esta falsa paz que existe ahora en el mundo es obra de Satanás, para que todos duerman y no recen por la paz. La paz nunca ha estado en más peligro que ahora. Por eso, hijos Míos, rezad estos Rosarios y Horas de Paz que os he pedido por la paz.
Atacad al enemigo que quiere la guerra, la muerte y la destrucción de todas las naciones y del planeta en el que vivís para que pueda haber paz.
Si no se hace esto, muchos morirán, muchos perderán la vida, incluso algunos que están aquí. Por tanto: ¡Rezad, Rezad, Rezad por la Paz!
He venido aquí como Mensajera de la Paz para llamar al mundo entero a la verdadera paz, que sólo es posible y sólo tiene lugar a través de la Oración.
¡Penitencia! ¡Penitencia y oración por la paz!
Hijo mío Marcos, gracias a ti Mis hijos de hoy no sólo Me conocen mejor a Mí y a Mi hijo Jesús, sino también al Padre.
Sí, al principio de Mis apariciones teníais tanto miedo de Dios, de Dios Padre, ¿os acordáis? Y poco a poco os enseñé, os mostré cuánto os amaba el Padre y cuánto había sufrido Él también por todo lo que habíais sufrido vosotros.
Sí, comprendiste el amor del Padre, comprendiste que el Padre nunca ordenó a nadie, nunca enseñó a nadie y nunca autorizó a nadie a hacerte daño. Así que te abriste a una gran capacidad de amar al Padre.
Sí, enseña aún más a Mis hijos lo grande que es el amor del Padre y continúa, continúa en el camino de la oración y de la consagración a Mí.
Si es necesario, te lo repetiré un millón de veces: Tu misión está cumplida, lo que el Padre quería de ti lo has hecho: que son las películas de Mis Apariciones, de los Santos y los Rosarios meditados y las Horas de Oración, sobre todo, Su revelación de Su amor a todos.
Así que puedes descansar en paz, tu misión ha sido cumplida. Has dado al Padre la mayor satisfacción, el mayor honor, la mayor alegría, la mayor satisfacción y retribución que podías dar.
Ahora, debes llevar todo esto aún más a Mis hijos, para que los que faltan puedan entrar en el arca de la salvación antes de que llegue el diluvio de fuego.
Siéntete en paz y feliz porque has dado al Padre, a Mi hijo Jesús y a Mí el mayor servicio, la mayor gloria, el mayor amor y la mayor obra de todos los tiempos.
Estoy feliz de que durante estas semanas hayáis mantenido estas películas benditas, estos Rosarios y Horas de Oración, transmitiéndose a Mis hijos cada día. Sí, habéis disminuido la acción de Satanás sobre ellos.
Igual que la serpiente no puede acercarse a una hoguera, ahora Mi enemigo no puede acercarse a ellos, porque están conectados a Mí y a Mi Llama de Amor, Mi presencia allí donde están, ahuyenta al enemigo y aleja a los demonios. Esto reduce los malos pensamientos, las tentaciones y las asechanzas del enemigo.
Por todo esto, hijo Mío, que es mérito tuyo, hoy te bendigo generosamente y te digo: Continúa siendo Mi orgullo, continúa siendo la causa de Mi alegría, la alegría de María. Sí, continúa y mantén siempre tu mirada fija en Mi Corazón Inmaculado.
Hoy derramo sobre ti 400.000 bendiciones especiales, hijo Mío Marcos, y acepto tu petición hecha esta mañana, tu ofrecimiento del Rosario meditado a Mí por la intención de tu padre Carlos Tadeu y de todos los que están aquí.
Acepto también tu ofrenda de la Hora de Dios Padre nº. 2. Convierto estas obras santas y sus méritos en gracias y derramo ahora sobre tu padre Carlos Tadeu 1.900.000 bendiciones y sobre los que están aquí derramo 1.274.000 bendiciones especiales.
De este modo, apago la llama de la caridad en tu corazón, que quiere beneficiar, enriquecer y salvar a todos.
Y también te bendigo a ti, Mi hijito Carlos Tadeu, gracias por venir a alabarme y consolarme, a alabar y amar al Padre Eterno.
Derramo sobre ti todas estas gracias y te digo: Te amo con todo Mi corazón y te protegeré siempre, como hasta ahora, de todo mal. Seguid haciendo Mis cenáculos.
Y a partir de ahora, rezad con Mis hijos el Rosario de la Llama de Amor nº 4 para que conozcan todo Mi amor, sepan lo que quiero de ellos. Reza también con ellos la Hora de la Paz nº 27 durante todo este mes.
Y durante el mes de septiembre, reza con ellos el Rosario de las Lágrimas núm. 21 para que comprendan Mi dolor y sientan la necesidad de amarme, consolarme y repararme.
Os miro constantemente. Os bendigo y os doy Mi paz.
Mamá te quiere mucho y vela por tu trabajo y tu sueño sin cesar y siempre tengo Mi mano apoyada sobre tu cabeza y tu corazón.
Doy las gracias a Mis hijos que ayudaron a Mi hijo Marcos a terminar Mis medallas, las imágenes que llevarán Mi gracia a todos Mis hijos.
Y hoy, también toco con Mi manto todas las imágenes de Mi Tienda del Mariel. Cada vez que me siento triste y afligida por los pecados del mundo, bajo allí y al contemplar las obras de amor de Mi hijo Marcos, me consuelo y exulto de amor y alegría.
Os bendigo a todos con amor: Pontmain, Lourdes y Jacareí.
En septiembre, el Padre Eterno vendrá Conmigo a celebrar Mi Fiesta de La Salette, y abundantes gracias serán derramadas sobre todos. Volved para que podamos continuar vuestra conversión.
Paz Mis amados hijos, descansad en Mi paz».
(San José): «Mis amados hijos, Yo soy José, vuestro Padre, os sigo amando y protegiendo a cada uno de vosotros.
Seguid rezando Mi Hora* cada domingo.
Os bendigo con amor».
"¡Soy la Reina y Mensajera de la Paz! He venido del Cielo para traeros la paz!"
Todos los domingos hay Cenáculo de Nuestra Señora en el Santuario a las 10 de la mañana.
Información: +55 12 99701-2427
Dirección: Estrada Arlindo Alves Vieira, nº300 - Bairro Campo Grande - Jacareí-SP
Tienda Virtual de Nuestra Señora
Desde el 7 de febrero de 1991, la Santísima Madre de Jesús visita la tierra brasileña en las Apariciones de Jacareí, en el Valle del Paraíba, y transmite Sus Mensajes de Amor al mundo a través de Su elegido, Marcos Tadeu Teixeira. Estas visitas celestiales continúan hasta hoy, conoce esta bella historia que comenzó en 1991 y sigue las peticiones que el Cielo hace para nuestra salvación...
La Aparición de Nuestra Señora en Jacareí
El Milagro del Sol y de la Vela
Oraciones de Nuestra Señora de Jacareí
Las Horas Santas dadas por Nuestra Señora en Jacareí
La Llama de Amor del Inmaculado Corazón de María
La Aparición de Nuestro Señor en Paray-Le-Monial
La Aparición de Nuestra Señora en Pontmain
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