sábado, 4 de octubre de 2008

Sábado, 4 de octubre de 2008

(San Francisco de Asís)

Jesús dijo: “Mi gente, muchos de ustedes pueden desear tener la casa y los coches más nuevos, o los últimos dispositivos electrónicos en su mundo de hoy. Pero incluso ahora su economía está en declive y el crédito para comprar estas cosas es más difícil. San Francisco también tenía riqueza de su familia, pero decidió renunciar a su herencia para vivir una vida de pobreza en completa confianza en Mí para que le provea. Él fundó la Orden Franciscana que también mantuvo sus principios de vivir sencillamente y enseñar la fe. Puede ser difícil para todos vivir en la pobreza, pero vivir una vida sencilla con un mínimo de artículos caros debería ser la vocación de todos. Es su enfoque seguirme en amor y enseñar a su familia la fe que es más importante que sus posesiones. Vivir una vida de desapego de los lujos y usar solo lo necesario, pone su énfasis más en las cosas del cielo que en las cosas de la tierra. El cielo es para siempre, mientras que las cosas terrenales pasan mañana. Siga el anhelo de su alma de estar conmigo en el cielo en lugar de los deseos del cuerpo por placeres y comodidades.”

Jesús dijo: “Mi gente, es innegable que un alma es colocada en la primera célula de la concepción de un óvulo y un espermatozoide. Los cromosomas humanos presentes solo podrían producir un ser humano si se les permite madurar. Este óvulo fertilizado no es menos o más humano a medida que se desarrolla en un bebé. La inhumanidad del hombre hacia el hombre se ve más en sus millones de abortos cada año, incluso peor que aquellos que mueren en sus guerras o por sus dictadores. La vida humana en el vientre es inocente e indefensa contra los médicos que brutalmente usan sus instrumentos para destrozar estos pequeños cuerpos en pedazos. ¿Cuánto tiempo creen que voy a dejar que continúe esta carnicería de Mis bebés? Les aseguro que América y todas las demás naciones que permiten los abortos están a punto de probar Mi ira en una limpieza mundial que nunca han visto. Los desastres naturales y pocos inconvenientes en sus finanzas parecerán nada en comparación con lo que está a punto de caer sobre ustedes. Están a punto de ver la masacre más brutal desatada sobre su gente en América que jamás hayan visto. Esto será una vez que la gente del mundo tome el control de su país. Solo Mis refugios serán sus lugares de seguridad. Esta persecución, hambruna y asesinatos tendrán solo un breve reinado. En la cima del poder del Anticristo, traeré Mi justicia sobre las personas y demonios malvados, y todos serán arrojados a las llamas del infierno para gemir y rechinar los dientes. El mal está siendo permitido por un tiempo, pero Mis fieles serán protegidos y recompensados en Mi Era de Paz y en el cielo. Puede que pierdan todas sus posesiones terrenales, pero ganarán el cielo por toda la eternidad.”