lunes, 14 de diciembre de 2009

Lunes, 14 de diciembre de 2009

(San Juan de la Cruz)

Jesús dijo: “Mi gente, esta imagen Mía prefigurada en la cruz es para enfatizar que Mi razón principal para encarnarme como hombre, fue para poder salvar al mundo de sus pecados y ser su Salvador en la cruz. Incluso mientras esperan celebrar Mi nacimiento en Navidad, los profetas les están diciendo que Dios enviará un Redentor para Su pueblo. No solo fui enviado para salvar al pueblo judío, sino también para salvar a todos los gentiles también. Les doy a todos la oportunidad de ser salvados, pero cada persona debe aceptarme como su Salvador y arrepentirse de sus pecados. Sin estos requisitos previos, no pueden entrar en el cielo. Cada persona tiene que elegir entre Mí o el mundo del diablo. Pero también deben aceptar las consecuencias de sus elecciones. Aquellos que eligen seguir Mis caminos, serán recompensados en el cielo. Aquellos que eligen seguir al mundo y los caminos del diablo, serán juzgados al infierno. No hay a nadie más a quien culpar por su destino elegido más que a ustedes mismos. Elijan amarme, y disfrutarán de una vida más allá de su imaginación.”

Jesús dijo: “Mi gente, les estoy mostrando esta cruz luminosa porque es la Cruz de Luz que será visible en el cielo en todos Mis refugios durante la tribulación. Están teniendo una visión de tal cruz en los diversos lugares que han recorrido. Varias personas les han relatado sucesos similares de cruces luminosas en los vidrios escarchados de los baños de la gente. En Thermal, California, han visto la cruz más hermosa que les he dicho que marcaría un lugar de refugio, y allí habría curaciones, tanto físicas como espirituales. Estos signos de cruces luminosas podrían ser porque la gente ha tenido experiencias espirituales en su vida de oración. Es definitivamente milagroso en su naturaleza, y también podrían ser signos de tierra santa donde Mis ángeles protegerán estas ubicaciones. Aquellos que tienen estas cruces, deben orar con discernimiento si hay una misión allí o un refugio allí. Las curaciones milagrosas podrían ser una mayor verificación de un lugar de refugio para los últimos tiempos. Regocíjense de que estoy compartiendo estos signos de Mi amor, y esta conexión con Mi muerte en la cruz para salvar a toda la humanidad de sus pecados.”