miércoles, 13 de mayo de 2020

Miércoles 13 De Mayo De 2020

Miércoles, 13 de mayo de 2020: (Nuestra Señora de Fátima)

Nuestra Santísima Madre de Fátima dijo «Mis queridos hijos, es para mí una alegría venir de nuevo a vosotros en recuerdo de mis apariciones a los tres niños de Fátima, Portugal. Les animé, así como a mis hijos de hoy, a rezar vuestros rosarios diarios, y especialmente a levantar esta restricción de las iglesias, para que la gente pueda asistir a la Misa diaria y dominical. También os animo a adorar al Santísimo Sacramento de mi Hijo siempre que podáis. Recordáis la señal que se dio en el cielo. Dije a la gente en 1917 que si no rezaban lo suficiente, les sobrevendría una guerra peor. También mencioné que si no rezaban lo suficiente, Rusia extendería sus errores por todo el mundo en el comunismo, como veis hoy. Visteis la Primera Guerra Mundial como castigo. Ahora, tenéis abortos por todas partes, y veréis un castigo más en el virus que volverá en otoño. Mi Hijo llamará a todos Sus fieles a Sus refugios cuando el virus corona de otoño mate a mucha gente peor que antes. Confía en Sus palabras y prepárate para la Advertencia y tu llamada a la protección de los refugios».

Jesús dijo «Pueblo mio, todos vosotros habeis estado atravesando esta pre-tribulacion con la amenaza de que este virus corona cause mas muertes que la gripe normal. Este virus no es natural porque los países al Norte y al Sur del ecuador están teniendo muchos casos. Si se tratara de una epidemia de gripe natural, no habría tantos casos en los climas más cálidos. En su lugar, se ha unido una cepa del VIH a este virus corona, lo que le permite propagarse rápidamente y unirse a tus células sanguíneas. Por eso es una creación de laboratorio. Gracias a vuestro distanciamiento social y al uso de mascarillas, el número de nuevos casos está disminuyendo. Os he dicho que en otoño se desatará un virus peor, y este peligro para vuestras vidas puede llamaros a Mis refugios. Os muestro un tenedor y una cuchara porque, tras Mi victoria sobre los malvados, seréis invitados a Mi banquete de bodas en el cielo. Así que sed pacientes y soportad vuestras dificultades físicas, porque estaréis Conmigo para celebrar Mi victoria en el cielo, ya que conocéis el final de la historia. Alabadme y dadme gracias por ayudaros a permanecer fieles a Mí en vuestro amor por Mí».