sábado, 6 de abril de 2019

Mensaje de Nuestra Señora Reina de la Paz a Edson Glauber

¡Paz mis queridos hijos, paz!

Hijos míos, yo, la Reina del Rosario y de la Paz, no me canso de llamaros a Dios y al camino del cielo.

No os apartéis de mi Corazón Materno, pues mi Corazón Inmaculado es el Arca que Dios os ha preparado para estos tiempos difíciles, de oscuridad y de pecado.

Entrad en mi Corazón, hijos míos, consagrándoos a menudo a él, dándome todo, para que pueda cuidar de todos vosotros y de vuestras familias.

Luchad contra Satanás rezando el Santo Rosario con más fe y amor. Ésta es una petición que viene directamente de mi Divino Hijo, pues el rezo del Rosario disipa el mal y el pecado, y atrae bendiciones y gracias del cielo. Con el Rosario, venceréis siempre cualquier batalla y dificultad que surja en vuestras vidas.

No desesperéis, pues rezando el Rosario, la luz de Dios os iluminará, y donde entra su luz, se destruye toda oscuridad. Rezad, rezad, rezad siempre más y con el corazón y los milagros del cielo sucederán en vuestras vidas y el mundo se convertirá.

Os amo y os acojo bajo mi Manto Inmaculado. Rezad por la conversión de los pecadores, rezad por los incrédulos para que abran su corazón a Dios y se arrepientan de sus actitudes equivocadas, mientras aún estén a tiempo de convertirse, porque un día muchos llorarán amargamente por haber despreciado la llamada que Dios les ha hecho, durante muchos años, para seguir los engaños del mundo, que no pueden salvarles ni darles la vida eterna. Gracias por vuestra presencia. Volved a vuestros hogares con la paz de Dios. Os bendigo a todos: en el nombre del Padre, del Hijo y del Espíritu Santo. Amén.

Hoy, la Virgen se ha aparecido acompañada de Santa Juana de Arco y Santa Gema Galgani. Estas dos Santas, hoy rezaron por la obra de Nuestra Señora en Itapiranga el Padre Nuestro y las Glorias. Nuestra Señora las trajo para que estuvieran a mi lado, ayudándome y guiándome, en estos días. Comprendí por la luz de Dios, la presencia de Santa Juana de Arco, porque fue calumniada y juzgada injustamente, por los ataques de sus acusadores, pero siempre supo defender y decir la verdad con fuerza y valentía, a pesar de todas las acusaciones y mentiras dichas contra ella y Santa Gema Galgani, porque venció los ataques de los espíritus infernales con sus oraciones, sacrificios y penitencias y su amor a Jesús.