sábado, 26 de enero de 2008

Sábado, 26 de enero de 2008

(San Timoteo y San Tito)

Jesús dijo: “Mi gente, hubo alegría en Mis apóstoles y Mis discípulos al poder llevar Mis Buenas Nuevas de salvación a todos los pueblos. Tocaron los corazones y las almas de aquellos que estaban abiertos a recibir Mis gracias y bendiciones. Curaron las enfermedades del cuerpo además de la enfermedad del pecado en las almas. Yo también curé a la persona entera en el cuerpo y el alma. Sus esfuerzos de evangelización se hicieron incluso corriendo el riesgo de ser martirizados por su fe. Hoy, Mis fieles pueden evangelizar sin temor a la muerte, pero es más difícil conseguir que la gente ore y alabe a Dios en medio de muchas distracciones mundanas de comodidades y placeres. Mientras miras esta visión, significa que necesitas levantar la vista hacia Mí para obtener tu dirección y no hacia tu dirección terrenal. Una vez que puedas morir a ti mismo y seguir Mi plan para tu misión, entonces lograrás más bien espiritual en Mi servicio. Cuando te llamo a evangelizar almas, no seas espiritualmente perezoso, sino ábrete a la oportunidad de salvar almas. Si supieras cuánto sufren las almas en el infierno, trabajarías aún más duro para evitar que las almas vayan allí. Pide al Maestro de la cosecha que envíe más trabajadores a Mi viñedo de almas, incluso como le dije a Mis discípulos que ahora serían pescadores de hombres. Reza y trabaja para salvar tantas almas como sea posible, y tu recompensa en el cielo será grande.”

Jesús dijo: “Mi gente, esta luz de precaución amarilla en un semáforo, y el color amarillo del autobús escolar en la visión, es una advertencia para América. Se está acabando el tiempo para que tu país se arrepienta y deje sus muchos abortos antes de que pronto veas Mi juicio contra ti. Los pocos niños en este autobús representan el número reducido de niños porque los están matando en el vientre, junto con sus dispositivos y píldoras anticonceptivas. Todos estos actos de asesinato y abusos del acto matrimonial están pidiendo Mi justicia. Muchos de tus desastres naturales están siendo permitidos ya que he retirado Mis bendiciones de ti debido a estos graves pecados. Continúas con tus pecados sin siquiera reconocer cuánto me estás ofendiendo. Eres casi ajeno al valor de la preciosa vida que estás matando en el vientre. Despierta América a la vergüenza de tus pecados, y arrepiente de ellos. Si te niegas a pedir Mi perdón, entonces puedes esperar una destrucción repentina.”