lunes, 24 de octubre de 2005

Mensaje de Nuestra Señora Reina de la Paz a Edson Glauber

¡La paz esté con todos ustedes, mis queridos hijitos!

Soy su Madre Celestial que los ama tanto. Nunca olviden estas palabras que les digo: mi amor por ustedes es eterno. Vengan bajo mi manto, para que pueda protegerlos y recibirlos con mi amor maternal. Deseo que todos ustedes acojan la llamada de mi Señor. Oren, hijitos, oren siempre más y en familia. Dios, en este tiempo de gracia, desea concederles gracias especiales. No desperdicien estas gracias, sino abran sus corazones a Él para que puedan recibirlas.

Dios me envía desde el cielo para ser su educadora y comandante en esta gran batalla espiritual. El diablo está destruyendo las almas de muchos de mis hijos y he bajado del cielo para ayudarlos. Lleven a todos sus hermanos la luz de Dios y su amor.

Les agradezco su presencia aquí esta noche y les digo que siempre los acompaño con mi mirada maternal. No dejen su conversión para mañana, porque podría ser demasiado tarde.

Un gran castigo está llegando sobre la humanidad pecadora, algo que nunca ha sucedido desde la creación del mundo. Abandonen su vida de pecado, para que puedan tener la gracia de Dios. Los bendigo a todos: en el nombre del Padre, el Hijo y el Espíritu Santo. ¡Amén!